Momentos de cristal

¿Y si nos pudiéramos refugiar para siempre en aquellos momentos de inmensa felicidad?

Momentos donde las preocupaciones se hacen polvo y los miedos se desvanecen como si tan solo fuesen pesadillas quemadas por la luz del amanecer.

Donde nada nos atormenta y no parece haber ningún peligro acercándonos. Un tiempo de paz, de alegría, de una sosegada tranquilidad. De poder respirar de verdad y sentirnos vivos. De saber que hemos venido al mundo para sentir, para disfrutar de cada día aunque a veces sea imposible.

Son esos momentos donde prestamos atención a los mínimos detalles: La fresca brisa que nos acaricia. La inmensidad infinita del cielo donde poder perdernos. La fugaz risa de un ser querido. El brillo titilante de las estrellas. El sonido de los pájaros o las olas y el latido vivaz de la naturaleza. El palpitar del mundo que nos hace sentirnos parte de él, pero que no todos saben escuchar. 

Y son esos detalles, por pequeños e insignificantes que parezcan, los que nos llenan y nos transportan a un nuevo universo idílico donde nada ni nadie podrá dañarnos. Donde todo está en equilibrio. Donde no hay lugar para el odio ni el dolor. 

Son momentos intensos pero frágiles, como el aleteo de una mariposa o un hermoso cristal. Nos dan una sensación de paz que parece que puede perturbarse en cualquier momento, como si fueran tan solo sueños de los que despertaremos tarde o temprano. Casi ilusiones que podrían desvanecerse y dejarnos de pronto vacíos.

Pero no hay que temer. Solo sentir. Disfrutar. Reír y gritar de alegría. Y sobre todo agradecer cada segundo, cada latido que nuestro corazón nos regala.

Porque no duran para siempre, pero seguirán creándose si dejamos que pasen. Porque aunque la vida a veces sea dura, siempre existirán momentos felices. Tiempo de gozo, de amor, de paz. Y aunque a veces duren poco, casi como el beso de una estrella fugaz en el cielo, nos dejarán grandes huellas.

Y son esos momentos, tan grandes y pequeños al mismo tiempo, los que queremos congelar para vivir en ellos.


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